viernes, 8 de mayo de 2020

A LOS QUE PREDESTINÓ, TAMBIÉN LOS LLAMÓ

SIGNIFICA LA FRASE “LLAMAMIENTO CELESTIAL” QUE ESTAMOS LLAMADOS ...
Romanos 8:30  
Y a los que predestinó, a éstos también llamó; y a los que llamó, a éstos también justificó; y a los que justificó, a éstos también glorificó.
 "A los que predestinó, también los llamó”
 En 2Timoteo 1:9 también encontramos la confirmación de estas palabras: "quien nos salvó y llamó con llamamiento santo". Acá hay una piedra de toque con la cual podemos probar nuestro llamado. "Y nos llamó a una vida santa, no por nuestras propias obras, sino por su propia determinación y gracia".
Este llamado desautoriza toda confianza en nuestras propias acciones, y nos conduce solo a Cristo por salvación, y después nos libra de las obras muertas para que sirvamos a un Dios vivo y verdadero. Así como Aquel que te llamó es santo, tú debes ser santo.
Si vives en pecado, no eres llamado, pero si en verdad eres de Cristo puedes decir: "Nada me duele más que el pecado, deseo deshacerme de él; Señor, ayúdame a ser santo". ¿Es este el anhelo de tu corazón? ¿Es esta la naturaleza de tu vida hacia Dios y su divina voluntad?
Otra vez, dice el Apóstol Pablo en Filipenses 3:13-14, el apóstol nos habla del "llamamiento celestial en Cristo Jesús".
Entonces no queda sino hacernos esas preguntas.
¿Es entonces tu llamado un supremo llamamiento?
¿Has ennoblecido tu corazón, poniéndolo sobre las cosas celestiales?
Otra prueba de que somos llamados la encontramos en hebreos 3:1: "Por tanto, hermanos santos, participantes del llamamiento celestial". El llamamiento celestial significa un llamado del cielo. Si solamente te llama el hombre, no eres llamado.
¿Proviene de Dios tu llamado?
¿Es un llamamiento hacia y desde el cielo?
¿Es tu llamamiento santo, supremo y celestial? Entonces amado hermano, has sido llamado por Dios, pues así es el llamado por medio del cual Dios llama a su Pueblo.

jueves, 7 de mayo de 2020

HAY LUTO EN NUESTRA ALMA

Desde hace 2011 años nuestros corazones aprendieron a ver el verdadero amor y el verdadero luto en el alma, sabemos que nuestro señor Jesucristo se levantó entre los muertos y vive a la diestra del padre Jehová, así también desde el día 7 de mayo a partir de las 03:00 de la tarde nuestro líder de la Iglesia en Caucasia "Dios Fuente de Poder" Pastor NELSON ENRIQUE TONCEL SAN JUAN, puesto por Dios para rescatarnos y ayudarnos espiritualmente, partió a los brazos de nuestro señor Jesucristo quien el día del señor con voz de trompeta y con voz de arcangel le levantara entre los muertos para que haga parte de su gloria, hoy todos las ovejas que se congregaban bajo su dirección, sienten un vacio en el corazon, pero nos consuela que el Espiritu Santo nos confirma que nuestro pastor esta en los brazos del señor y que morir en Cristo es ganancia, por eso con mayor animo corremos esta carrera, con el proposito de tambier alcanzar lo que nuestro pastor ya alcanzó, La Vida Eterna. 
Aqui les dejo un recuerdo hermoso de nuestro pastor.

LA PRUDENCIA Y EL CREYENTE


La Tarea De Ser Un Cristiano Prudente - Cristianismo

Proverbios 22:3. El avisado ve el mal y se esconde; Mas los simples pasan y reciben el daño”.
En este tiempo en que la humanidad está enfrentando una crisis de salud por consecuencias del pecado, es muy frecuente encontrarnos con personas y aun creyentes que manifiestan, a otros creyentes, “donde está la fe”. En una forma religiosa.
Para qué vamos a tomar medidas, nosotros podemos estar tranquilo porque tenemos fe”. Y en ese sentido es que el señor nos trae esta palabra. 
Se puede ser un creyente de fe, pero cuidado no sea que estemos tentando a Dios con nuestro obrar. Porque para eso él nos dejó su palabra. Vamos a analizar varios versículos bíblicos los cuales no da el señor para enfrentar esos ataques que son comunes contra el creyente, para probarlos como verdaderos cristianos.
Ahora en el versículo que acabamos de leer, podemos observar que el señor nos manda a ser prudentes ante el peligro.
Prudencia, es una cualidad que debe tener todo cristiano, porque esto agrada a Dios, pero ¿qué significa en realidadAlgunos la entienden como el manejo correcto de las palabras, otros en cambio, como conducta de juicio cabal en la cual las personas demuestran su equilibrio emocional o simplemente una conducta moderada, es decir el saber obrar. Pero en realidad ¿Dónde se encuentra la fuente de su significado?
Para encontrar las respuestas correctas debemos buscar en la palabra de Dios, como la única fuente de verdad y sabiduría que nos hará conocer el valioso significado de la prudencia.
Es necesario entender en primer lugar, que la prudencia es una senda por la cual todo cristiano debería caminar, porque Dios mismo la creó.
La prudencia nos enseña a conducirnos correctamente en cualquier situación. Por ejemplo: en nuestro hablar, evitando las palabras necias sin edificación y refrenando la lengua de todo cuanto quiera hablar, cuidando lo santo y verdadero.
Proverbios 10:19. "En las muchas palabras no falta pecado; mas el que refrena sus labios es prudente".
A veces empezamos hablar en una reunión con nuestros hermanos – familiares o vecinos, y en la tanta palabrería no falta el pecado contra nuestro prójimo, y vamos perdiendo nuestra santidad. Más la prudencia nos evitará el caer en nuestra propia justicia, porque sin prudencia llegaremos a pensar que lo que estamos diciendo o haciendo es lo justo y que estamos en la verdad, más dice:
Proverbios 12: 16. "El necio al punto da a conocer su ira; mas el que no hace caso de la injuria es prudente".
Aunque nos injurien o nos digan que no tenemos fe, que no somos cristianos, la prudencia no nos dejará caer. Porque la prudencia lleva al hombre a dejar la necedad y a buscar la sabiduría, es decir, a desechar actitudes, pensamientos, costumbres y conductas viciadas por el viejo hombre, con aquella naturaleza caída cuya característica sólo es el egoísmo, la falta de dominio propio, el apresuramiento y la insensatez. Obras de la carne manifestadas en actitudes y respuestas imprudentes, que sólo causan confusión, malestar y discordia.
Proverbios 13:16. "Todo hombre prudente procede con sabiduría; más el necio manifestará necedad".
La sabiduría en Dios da lugar a la actitud de prudencia, porque la sabiduría es lo que hace brillar el corazón del cristiano en el entendimiento correcto de las cosas.
Haciendo que en los hijos de Dios, siempre se encuentre dulzura de palabras, conducta agradable, gracia y favor en todo lo que manifiestan, libres de prejuicios y argumentos de mentira. Varones y mujeres prudentes que transmiten bien, en toda su forma de ser, por la sabiduría que recibieron de Dios, por eso dicen los proverbios;
Proverbios 16:21. "El sabio de corazón es llamado prudente, y la dulzura de labios aumenta el saber".
Proverbios 17:27. "De espíritu prudente es el hombre entendido".
Ahora, es hermoso entender que la Palabra de Dios, es la que hace prudente al hombre, por eso la necesidad de leerla constante mente, Jesús dijo; “Escudriñad las Escrituras; porque a vosotros os parece que en ellas tenéis la vida eterna; y ellas son las que dan testimonio de mí” (Juan 5:39).
Porque en ella se encuentran los buenos fundamentos que lo llevarán a construir sobre la roca que es Cristo.
¿Cuándo estamos construyendo en Cristo?
Cuando escuchamos el consejo de Dios, aprendemos a ser prudente al oír y poner por obra su Palabra. Acción que además, nos hará prevenir y evitar el mal que la imprudencia y la necedad podrían causarnos. Nuestro señor Jesucristo no lo advirtió por medio de su palabra;
Mateo 7:24. "Cualquiera, pues, que me oye estas palabras, y las hace, le compararé a un hombre prudente, que edificó su casa sobre la roca".
La prudencia nos hará entendidos en el camino en el cual debemos andar, guardará nuestros pasos de la insensatez y la insolencia, para seguir el camino de la verdad y la vida, sin tropiezos.
Proverbios 14: 8. "La ciencias del prudente está en entender su camino; más la indiscreción de los necios es engaño".
Es tiempo de considerar la prudencia en nuestras vidas, es tiempo de dejar la imprudencia, es decir, la simpleza.
¿Qué es el simple bíblicamente?
Es la expresión dada en el AT que se traduce de la palabra griega “pethî”, "inexperto", "inocente", "que no sospecha"; alguien sobre quien fácilmente se puede ejercer influencia, ya sea para bien o para mal, y a veces alguien que, además, es moralmente débil.
Proverbios 14:15-16. "El simple todo lo cree; más el avisado mira bien sus pasos. El sabio teme y se apartará del mal; mas el insensato se mostrará insolente y confiado".
Ahora, cuando la palabra nos pide el dejar de ser simples, es el dejar de hacer las cosas a la ligera y pensar correctamente en aquello que es conveniente decir o hacer.
Para terminar, sólo queda decirles que la prudencia en Dios es la capacidad de;
·        Seguir el buen consejo.
·        De mostrar mansedumbre y calma ante las ofensas.
·        Es saber dar una respuesta adecuada.
·        Es aprender a callar cuando no es oportuno hablar.
·        Es reflexionar con cuidado en toda circunstancia adversa, antes de reaccionar equivocadamente.
·        Y es ser entendidos en todo lo que hacemos y decimos, con la sabiduría de Dios.
Miremos un ejemplo, dado por nuestro señor Jesucristo, quien fue prudente como ejemplo a nosotros.
Juan 7: 1-9.
Después de nuestro señor haber exhortado a los discípulos y la multitud que le seguía, y de donde muchos se devolvieron atrás por que sus palabras les parecieron muy dura, y de haber conocido que le buscaban para matarle, el señor Jesús usaba la prudencia.

LOS PARALÍTICOS ESPIRITUALES


Paraliticos Espirituales - YouTube
JUAN 5: 1-15
Empecemos por notar que la primera parte de los comentarios relatados en este pasaje tuvieron lugar en un estanque llamado Betesda, que significa casa de la misericordia y que tenía a sus alrededor cinco pórticos en los que se cobijaban una multitud de enfermos, ciegos, cojos y paralíticos.
Pero entre todos los enfermos había uno por el que Jesús se interesó de manera especial. Se trataba de un hombre que hacía treinta y ocho años que estaba sufriendo mientras esperaba una sanidad que nunca llegaba. Cuando Jesús inició la conversación con él, lo primero que le dijo nos puede parecer algo ridículo: "¿Quieres ser sano?".
Pero nunca hay nada absurdo en lo que el Señor hace. De hecho, el Señor estaba abordando el problema en su misma raíz. Porque aunque nos pueda parecer extraño, hay muchas personas que están enfermas y prefieren continuar en su estado, ya que éste les atrae por la lástima que producen y la ayuda de otros.
Y peor aún, tu les ofrece la solución a sus problemas, como es el invitarlos a buscar a Cristo y lo que recibes como respuesta es; “Vamos  ver si vamos” un vamos a ver que nunca realizan.
Se puede percibir ese estado que no quieren salir del problema ¿Cuántos hay que a pesar de tantos fracasos en la vida, no quieren acudir a Dios en busca de una solución a su situación?
Viven sin poder escapar de su dilema personal, de los problemas y el vacío de su alma, y sin embargo se niegan a ser sanados moral y espiritualmente. A pesar de que se sienten totalmente insatisfechos con su situación, prefieren resignarse como excusa para no hacer nada y así seguir viviendo de la misma manera que les causa sus problemas.
Ahora miremos en el texto bíblico, ante la pregunta que le hace nuestro señor Jesús, el paralítico, este busca la excusa perfecta para justificar su situación, pues si observamos bien el texto, nuestro señor Jesús no le estaba preguntando si tenía quien lo metiera en el estanque. Así encontramos muchas personas, que ante el llamado a buscar a Jesús, buscan cantidades de excusas para justificar su situación o condición pecadora. Y esta condición de frustración les impide darse cuenta de que tienen delante de ellos la verdadera solución a su situación, tal como le pasó al Paralítico, no podía ver que tenía delante de él al hijo de Dios.
Ahora más inquietante se nos hace cuando después de haber sido sanado, este no busca agradecer al señor, allí en el texto bíblico no relata esto, más bien nos dice que Jesús es el que luego le halla de nuevo y le alerta a dejar el pecado.
V- 14. "Has sido sanado; no peques más para que no te venga alguna cosa peor"
Estas palabras del Señor nos sorprenden.
¿Qué podía haber peor que pasar treinta y ocho años paralítico, tirado en el suelo y olvidado de la sociedad?
Sin duda es posible encontrar tragedias mayores en un mundo como el nuestro.
Pero ¿a qué se refería el Señor? Pues indudablemente tiene que ver con el castigo eterno. Y la única forma de evitarlo es seguir las indicaciones de Jesús: "No peques más".
Para terminar este mensaje nos quedamos con una sensación un tanto extraña. ¿Por qué decidió Jesús sanar a aquel paralítico? Por un lado, el enfermo ni sabía quién era Jesús, ni tampoco esperaba nada de él. Además, una vez sanado, el Señor le tuvo que advertir seriamente que no siguiera viviendo de la misma manera que hasta ese momento lo había hecho, para que no le viniera alguna cosa peor, lo que nos hace pensar que después de su sanidad, no parecía tener intenciones de cambiar espiritualmente.
Así se encuentran muchas personas en el mundo, enfermos en lo natural y en lo espiritual, son sanados en lo natural por el señor, pero siguen enfermos espiritualmente, paralíticos, ciegos, y cojos.
Y lo podemos discernir porque una vez reciben sanidad del señor no tienen la más mínima intención de cambiar de pensar y su carácter sigue siendo la de un pecador.

sábado, 25 de abril de 2020

REGRESO A CASA

Después de mucho tiempo de estar inactivo la página cristiana, por motivos de encontrarnos capacitandonos para este momento de la vida, de poder entregar un material a todos los hombres y mujeres que buscan de Dios, como ayuda espiritual, volveremos a retomar este medio y ahora lo hacemos de la mano con una gran congregación ubicada en el municipio de Planeta Rica - Córdoba, y la cual está compuesta por hombres y mujeres luchadores en el amor del señor.

Por eso pedimos perdón a nuestros seguidores y aquellos quienes ingresaban al blogger con el fin de alentar su espíritu en los momentos difíciles que tiene la vida, por haberles abandonado tanto tiempo, pero asi lo quiso nuestro señor Dios, eterno y misericordioso padre del cielo, que para este tiempo dificil de crisis humanitaria volvamos a encontrarnos.

Estaremos trayendoles temas de la palabra del señor dada por los profetas en los tiempos del pueblo de Israel, y la cual está vigente en sus profecías para el mundo contemporáneo. Así que amigos no se separen de esta página porque estaremos mucho tiempo con ustedes.

SOMOS MAS DESOBEDIENTES QUE EL MAR



Job 7:12 [RV60]

¿Soy yo el mar, o un monstruo marino, Para que me pongas guarda?

"¿Soy acaso el mar, el monstruo del abismo, para que me pongas bajo vigilancia?"

Esta era una pregunta extraña que Job le formuló al Señor. Él se sentía demasiado insignificante como para ser observado y castigado, y esperaba no ser tan desobediente como para necesitar ser controlado.
La pregunta era natural proviniendo de alguien que padecía sufrimientos insoportables pero, después de todo, puede producir una respuesta humillante. Es un hombre, no el mar, pero está mucho más lleno de dificultades y desobediencia. El mar obedece respetuosamente sus límites, y aunque sea solo una faja de arena, el mar no sobrepasa el límite. Poderoso como es, el mar escucha el divino "hasta acá", y cuando está más embravecido por la tempestad respeta la palabra; pero el hombre obstinado desafía al cielo y agobia a la Tierra, y tampoco existe un fin para esta ira rebelde.

El mar, obediente a la luna, baja y fluye con incesante regularidad y, por lo tanto, rinde tanto una obediencia activa como pasiva, pero el hombre, intranquilo más allá de su esfera, duerme dentro del cumplimiento del deber, indolente en donde debería ser activo. Ni avanzará ni se detendrá a la orden divina, sino que prefiere, huraño, hacer lo que no debería hacer y dejar sin hacer aquello que se requiere de él.

Cada gota en el océano, cada burbuja perlada y cada espuma, todo caparazón y piedrita sienten el poder de la ley y se rinden o se mueven de inmediato.

¡Oh, qué nuestra naturaleza fuera, aunque sea en una milésima parte, conforme a la voluntad de Dios! Decimos que el mar es inconstante y falso, ¡pero qué constante que es! Desde los días de nuestros padres y en los tiempos anteriores a ellos, el mar está donde siempre estuvo, golpeando los mismos acantilados al mismo ritmo; sabemos dónde encontrarlo, no abandona su lecho y no cesa su bramar incesante, pero ¿dónde está el hombre vano, el hombre inconstante? ¿Puede el hombre sabio adivinar por cuál insensatez será tentado en su obediencia? Necesitamos más vigilancia que el mar ondulante, y somos mucho más rebeldes.

Señor, contrólanos para tu propia gloria. Amén.

A LOS QUE PREDESTINÓ, TAMBIÉN LOS LLAMÓ

Romanos 8:30   Y a los que predestinó, a éstos también llamó; y a los que llamó, a éstos también justificó; y a los que justificó,...