viernes, 17 de junio de 2011

¿POR QUE SUFRIR?



Bienaventurados los pobres en espíritu" Mateo 5:3
  Jesús enseñó que el sufrimiento visto desde la perspectiva de Dios, se inclina a favor del oprimido y produce mucho bien al alma. Hay ciertas situaciones que a veces pensamos que nos ocasionan perdida, pero en realidad traen mucho bien a nuestra vida. Esta enseñanza aparece en el Sermón del Monte y en otras declaraciones del Señor: los primeros serán postreros (Mateo 19:30; Marcos 10:31; Lucas 13:30) y, el que
se humilla será enaltecido (Lucas 14:11,18:14). Pero ¿por qué escogería Dios a los oprimidos para brindarles una atención especial? Veamos algunos beneficios:
1. El sufrimiento nos ayuda a darnos cuenta de nuestra imperiosa necesidad de Dios y de la redención.
2. El sufrimiento nos ayuda a experimentar dependencia de Dios e interdependencia con otras personas.
3. El sufrimiento nos ayuda a distinguir entre las necesidades y los lujos.
4. El sufrimiento nos ayuda a invertir tiempo en Su presencia, porque en la desesperación clamamos a Dios.
 Aquellos que vemos nuestra pobreza y necesidad, aquellos que lloramos ante la injusticia y sufrimos haciendo la Voluntad de Dios somos bendecidos. Diariamente luchamos con nuestra autosuficiencia. En el momento del sufrimiento, es cuando debemos recurrir a alguien que nos fortalezca. No seamos personas autosuficientes, orgullosas, o altivas que vivimos la vida dependiendo de nuestra capacidad, talento, personalidad, discernimiento o conocimiento, porque todo esto es limitado y humano. Humillémonos y dependamos sobre todo del único Dios, que es Eterno, Altísimo, Todopoderoso, Omnisciente y que como dice el profeta, tiene “planes para lo bueno y no para lo malo, para darnos un futuro y una esperanza” (Jer. 29:11

jueves, 16 de junio de 2011

EL TIEMPO LO DICE TODO

En todo lo que he vivido, grandes cosas he aprendido pero solo con el tiempo me he podido dar de cuenta cuan lejos y apartado de Dios he vivido y por eso hoy comprendo que no puedo perder un minuto mas de mi vida y seguir a Jesucristo mi redentor, te amo Cristo.

DESCUBRIENDO EL REINO DE DIOS

Mateo: 3:1 En aquellos días vino Juan el Bautista predicando en el desierto de Judea,
3:2 y diciendo: Arrepentíos, porque el reino de los cielos se ha acercado.
3:3 Pues éste es aquel de quien habló el profeta Isaías, cuando dijo:
Voz del que clama en el desierto:
el libro de Mateo, escrito por el mismo apóstol que nuestro señor Jesús llamo a servir, Mateo que su nombre en judío es LEVI y quien ejercía su oficio de cobrador de impuesto lo que lo llevaba hacer un hombre despreciado ante sus raza, los que eran conocidos como publicanos, ahora es quien nos relata la vida del señor Jesucristo, en los capítulos 3 y 4 nos muestra como es el inicio del Ministerios de Jesús, hablándonos de Juan el Bautista quien predicaba a las orillas del río Jordán manifestando a los Judíos y toda Jerusalén sobre el arrepentimiento "Arrepentios que el reino de los cielos se ha acercado"  mismas fraces que después nuestro señor Jesús recordara cuando inicio su ministerio (Mateo 4:17) Desde entonces comenzó Jesús a predicar, y a decir: Arrepentíos, porque el reino de los cielos se ha acercado. Dos palabras en común predicaron Juan el Bautista y nuestro señor Jesucristo pero que el hombre no alcanza a comprender ni los de aquella época ni los de la época actual, los de esa época solo querían reinos que le gobernacen y les sacasen de la pobreza, mostrándoles bienestar económicos por tal motivo podemos encontrar en la palabra de Dios que dice " (Juan 1:11) A lo suyo vino, y los suyos no le recibieron.  Lo mismo pasa con la época actual el hombre no espera sino un gobierno un reino donde sus dificultades económicas sean aliviadas y no comprenden las fraces de nuestro señor Jesucristo sobre el arrepentimiento de pecados para recibir el reino de Dios en nuestro corazón.
hace 2500 años en el tiempo del profeta Daniel, nuestro Dios Jehová mostró al profeta los reinos de Babilonia - Medio Percia - Roma y los reinos de la Grecia o conocido como el Reino de la Gran Bretaña, el Reino de los E.E.U.U y los países bajos, en su revelación mostraba la destrucción de estos reinos que era gobernados y que son gobernados por el reino espiritual de maldad conocido como el Reino de Satanás, y por medio de su hijo Jesucristo nos presenta el Reino del cielo gobernado por Jesús y que es eterno. Pero para muchos desconocido así como lo es un profeta y Qué es un profeta? La imagen de un profeta es la de un hombre vestido con ropa sencilla, con un báculo en la mano, parado en la puerta de una ciudad, proclamando los juicios de Dios. Eran personajes no tan populares, si hubiera existido el Twitter en aquella época, no hubieran tenido un gran número de seguidores. Y sus fotos en Facebook serían siempre casi con la misma ropa, con la gente haciendo muecas de desprecio por su mensaje. Por supuesto, estarían en Jerusalén, donde estaba el Templo de Dios. Pero hacia el siglo VII A. C., ya no existía ni Templo, ni Jerusalén era una gran ciudad del mundo de aquel entonces. Eran más bien los leones, los animales salvajes, los dueños de una ciudad y de un país desolado. La pregunta era, ¿y ahora qué? ¿Qué pasaría con el futuro?
Como Dios es el único que conoce el futuro como la palma de su mano, sigue dando a conocer detalles sobre el futuro. Pero ahora los tiempos son diferentes. Pero Dios siguió revelando asuntos sobre el futuro, asuntos que hasta el día de hoy, siguen causando asombro y son el interés de muchos estudiosos de las profecías bíblicas. y a través de Mateo nos muestra el Reino de los Cielos que se obtiene a través del arrepentimiento de todos nuestros pecados un arrepentimiento de todo corazón. este arrepentimiento mueve la mano de Dios y tu puedes notar como todo a tu alrededor cambia porque empiezas a vivir en el verdadero Reino de Dios en el Reino Eterno.

viernes, 10 de junio de 2011

TENER LA MENTE PARA JEHOVA

"La palabra de Cristo more en abundancia en vosotros" Col. 3:16
En mayo del 2009, cuando Carlos Hayward murió, a los 87 años, dejó un legado para sus hijos y nietos. Él y su esposa Virginia habían servido fielmente como misioneros en India y en Sudáfrica durante muchos años. De todos modos, cuando cumplió 73 años, él comenzó a seleccionar y memorizar pasajes de la Biblia con el propósito de «acabar bien», con su mente llena de la verdad de Dios. Denominó su proyecto: «Plan de memorización de toda la Biblia». Sus hijos lo llaman: «La lista de Carlos». Escogió un versículo lema (Colosenses 3:16), al menos uno de cada libro del Antiguo Testamento, como mínimo otro de cada libro del Nuevo Testamento, y un versículo o más de cada capítulo de las Epístolas. Comenzó con Génesis 15:6, «y creyó a Jehová, y le fue contado por justicia», y terminó con Apocalipsis 22:17, «y el que tiene sed, venga; y el que quiera, tome del agua de la vida gratuitamente».
En total, Carlos memorizó 239 versículos. Me recuerda al salmista, que escribió: «En mi corazón he guardado tus dichos, para no pecar contra ti» (119:11). Al igual que Carlos, el salmista meditaba y se deleitaba en la Palabra de Dios (vs. 15-16). ¿Qué mejor objetivo podríamos tener que llenar nuestras mentes con la verdad del Señor?

A LOS QUE PREDESTINÓ, TAMBIÉN LOS LLAMÓ

Romanos 8:30   Y a los que predestinó, a éstos también llamó; y a los que llamó, a éstos también justificó; y a los que justificó,...